En multitud de ocasiones nos preguntamos desde nuestro rincón de la banda por qué tal jugador no ha visto a su compañero solo, por qué ha tirado rodeado de contrarios, etc., y personalmente creo que la respuesta está en las REFERENCIAS.
Si poneis la mano en un ángulo de 45 enfrente de la cara de un recién nacido, no la vera. Su campo de visión esta limitado a una serie de grados. A medida que crecemos ese campo de visión aumenta en amplitud, hasta llegar a unos 140 grados. De aquí nace la visión marginal, es decir, la capacidad de estar mirando algo mientras que veo otras cosas que pasan a mi alrededor, capacidad tan importante en el baloncesto.
En el baloncesto existen multitud de referencias. Cuantas mas domine un jugador, mejor serán sus tomas de decisiones, ya que tendrá mas datos para el análisis. Aquí también entrara el aspecto de la velocidad del análisis y la consecuente orden de ejecución. El trabajo diario junto la mecanización ayudan a incrementar la velocidad de estos actos.
Centrándonos en ataque: el balón, el aro, mi defensor, la situación de mis compañeros, los espacios libres, las lineas del campo, marcador del partido, tiempo del ataque. Existen otras referencias como el publico, los entrenadores, el banquillo rival y el nuestro, momento del partido, rachas positivas y negativas, estados emocionales.
Cuando vemos un partido de equipos de cantera desde la grada o dirigiéndolo desde el banquillo manejamos, como adultos, mas referencias que nuestros jugadores, y cuanto mas pequeños son ellos, mas es la diferencia en la cantidad de información que analizamos y con la que ellos trabajan.
¿Por qué un benjamín solo sigue a su atacante en defensa? Porque probablemente no sea capaz de ver a su atacante, al balón y al aro al mismo tiempo. Maneja una sola referencia, el jugador a quien tiene que defender.
¿Por qué ha dado ese pase, si tenía a un compañero libre? Probablemente, cuando estaba pensando en dar el pase, su compañero estaba inicialmente libre, y el jugador se queda con esa referencia. Pero la situación cambia, porque en el baloncesto las cosas pasan muy deprisa, pero el jugador se ha quedado con la referencia en la cabeza de que su compañero estaba libre, y allí manda el balón.
Otro ejemplo muy claro es el del rebote defensivo. Ahí tienen que manejar a su atacante, al hombre con balón, la trayectoria de este, el aro y la situación de otros defensores y el gesto de evitar que se meta el atacante. Si pretendes que tu equipo de chicos de 12 años realice el gesto vas a fracasar, y perder mucho el tiempo, ya que no son capaces de manejar tantas referencias al mismo tiempo. Le podrás enseñar una referencia, y cuando la domine, pasar a la siguiente, y al final, con tiempo, dominara el rebote.
Las referencias van directamente asociadas a la toma de decisiones. Hay que tener mucha paciencia con los jugadores de cantera y darles sus tiempos.
Tenemos que ayudarles a descubrir esas referencias, y tenemos que ser capaces de descubrir cuando es el momento adecuado para dar un nuevo paso en el proceso de aprendizaje.